Inclasificable, impredecible, ingobernable. Así es la música de Héctor Guerra, quien se nutre de innumerables estilos para crear el suyo propio. El que fuese fundador de PachamamaCrew y figura de la música alternativa latina (no olvidemos que ha compartido escenario con artistas como PublicEnemy o Mayor Lazer) regresa a lo grande tras un tiempo de parón forzado por la actual situación sanitaria.

En esta ocasión el cantante hispano-boliviano vuelve con una fusión de dancehall, trap y reggaetón creado para que se nos desencajen las caderas. Y para ello une sus fuerzas a las de Romina Bernardo aka Chocolate Remix, referente de la comunidad LGTBIQ, para mandar además un mensaje reflexivo e inclusivo, con la libertad de pensamiento como vehículo motor.

Pero hay más intrahistoria detrás de “Tantrap”. La canción nació hace tres años, cuando Héctor y Romina se juntan en el estudio que el fallecido Jota Mayúscula y Nafamacho tenían en Madrid, Más Graves. Allí, bajo la supervisión del que quizá sea el mejor productor de la historia del rap español, nació este corte con influencia del afrobeat y del reggaetón old-school. Y que, después de 3 años, sigue sonando igual de fresco que en aquel verano de 2018 que comenzó a fraguarse.

Así nació “Tantrap”, una canción que nos habla sobre la liberación sexual, la discriminación y la censura, al tiempo que nos hace bailar y evadirnos gracias a un ritmo alegre y pegajoso. Y que será, además, el último adelanto que Héctor presentará de Perreo Cósmico, el disco que publicará a finales de mayo.

De él solo podemos esperar ese sonido multicultural y colorido que siempre ha estado presente en la música de Guerra, quien saltase a la fama con PachamamaCrew, aquel grupo que pasó de cantar en el metro de Madrid a revolucionar la escena urbana en España. Y que nos demostró que la música es mucho más que notas y ritmos; es cultura y es vida.