Ëda Diaz sigue fascinada por las conexiones, por conectar el pasado cultural de su tierra mediándolo con la actualidad de la música en formas como el pop, la electrónica y los ecos de la ciudad. Artistas como Björk, Rosalía, James Blake, La Chica o Buena Vista Social Club están en su naturaleza.
Ahora también es capaz de empatizar con todos los que no somos capaces de levantarnos de la cama dando un triple mortal, y preferimos encogernos de nuevo bajo la sábana. Su nuevo sencillo ‘Sábana y Banano’ va de eso.
La propia Ëda nos cuenta “¿Quién no se ha vuelto a tapar y acurrucar para seguir tapado? ¿Volver quizás a la ciudad de los sueños? En el nivel de los simbolismos ocultos existe esta necesidad de escapar de las obligaciones, de lo que sería “conveniente” hacer en la sociedad.”
“Busqué separarme de autoridades como las que representan los padres, los maestros, o las convenciones sociales. Ardía ese deseo de convertirme en mi propia autoridad, de tener mi propio mando, de tomarme un respiro y dejar de querer agradar dando una imagen que pensé sería agradable para los demás… Lo hice mirando hacia atrás. En aquel momento yo era estudiante de ciencias políticas. Creo que la idea de dejarlo todo para hacer música ya estaba presente en mi mente”.
Ëda Díaz debutará con álbum (‘Suave Bruta’, Airfono 2024) el próximo 2 de febrero. Una inmersión total en el mundo onírico de Ëda, un puente entre París y Medellín tejido con “alta costura” pop, notas latinas, urbanas y electrónicas.
Biografía
¡Bienvenidos a la República Franco-Colombiana de Ëda Díaz! Aquí comemos crepes con una “crème de caramel-beurre-salé” mientras bebemos una limonada de coco muy fresca. De fondo: pop elegante hilado con ritmos tradicionales colombianos como el bambuco viejo o el vallenato. En este ambiente latino y silencioso, donde el sol encanta a la melancolía, la cantante y bajista celebra la “belleza en el caos” y afirma su dualidad como mujer con doble nacionalidad. A un lado o al otro del Atlántico, Ëda conecta sus diferentes facetas musicales y defiende la complejidad de su herencia.
¡Y qué legado! Eléonore Diaz-Arbelaez comienza oficialmente a tocar el piano con tan solo 8 años. Hija de un urbanista colombiano y una modista francesa que se conocieron en un vuelo de Montevideo a París, se movió muy temprano entre dos culturas, viajando de un continente a otro hasta el punto de confundir francés y español. Para que nunca se sienta desconectada de sus raíces hispanas, su padre recurre a la música y la nutre con grandes artistas como Buena Vista Social Club, Joe Arroyo, Julio Jaramillo… Aquí también crece entre dos mundos, ambos forjados por el rigor del conservatorio y animada a través de las reuniones familiares donde su encantadora abuela “Nenita” la introdujo en el folklore latinoamericano.