La nueva canción de YAKA late con fuerza desde el primer segundo. Un riff de guitarra marca el ritmo, mientras la melodía empuja hacia adelante con una urgencia que no se disfraza. La producción es directa, sin ornamentos innecesarios, y se apoya en una formación clásica: guitarras, bajo, batería y sintetizadores que no buscan brillar por separado, sino construir un paisaje sonoro crudo, casi físico. El tema habla de un personaje al borde del colapso, atrapado en una sociedad que parece a punto de estallar, pero que aún guarda una chispa de esperanza con la llegada de la primavera.

Compuesto y grabado en La Plata, el sencillo reúne a YAKA en voz, guitarras y sintetizadores, junto a GómeZ en batería y Matías Olmedo en guitarra y bajo. El resultado es una canción que no solo suena potente, sino que transmite una tensión emocional que se siente en cada compás. Es una declaración de intenciones: hay algo que se rompe, pero también algo que quiere nacer.

Yaka Presenta Su Nuevo Sencillo Y Lyric Video: “Lo Que Nos Queda”
Yaka / Foto: Tomás Herce

YAKA es el proyecto solista de Gabriel Herce, músico y realizador audiovisual. Después de más de 25 años en La Plata, volvió a Los Toldos, su ciudad natal, donde sigue desarrollando su obra entre la música y el cine. Desde adolescente formó parte de distintas bandas de rock, siempre como compositor y cantante. Estudió cine en la UNLP y construyó una sólida trayectoria como director y montajista de documentales, ficciones y videoclips.

Entre 2012 y 2015 integró El Belafonte, con quienes publicó dos EP y dirigió el videoclip La del huracán. En 2019 lanzó su primer disco solista, Yaka, de carácter acústico y profundamente introspectivo. Su vínculo con el cine también lo llevó a componer la banda sonora del documental Iron Mountain (2020), donde su sensibilidad musical se cruzó con la narrativa documental.

En noviembre de 2025 llegará su segundo álbum de estudio, Entre otras cosas, una obra que se afirma en la canción rock y se despliega entre la electricidad cruda, la intensidad emocional y algunos pasajes acústicos que funcionan como respiro. Es un disco que no busca respuestas, pero sí abrir preguntas. Que no teme mostrar las grietas, porque ahí también hay belleza.

Yaka