El músico canario, partiendo de una confluencia de estilos latinos mezclados con bedroom pop, se vuelve más ecléctico en cuanto a géneros, temáticas y colaboradores en su nuevo disco. Entre cumbias y rumbas, guitarras cristalinas y letras desenfadadas, Muyaio reflexiona sobre la relación de la humanidad con la tecnología, con internet y, a la postre, consigo misma.
En Pop Picón colaboran músicos como Joan Colomo, Abel de Los Vinagres, Conxita Herrero y Fermín de Tronco, Fran Baraja, Cristina López y Angélica Pérez, y productores e ingenieros de sonido como Yeray Herrera, Pablo Sumiciu, Jonás García, Alex Ferrer, César J. Cisneros y Raico Mejías.
Muyaio presentará su nuevo disco en la sala La Nau de Barcelona el 17 de diciembre acompañado de Joan Colomo y la banda Tronco, que cantarán juntos y revueltos como Troncolomo.
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Lxs más jóvenes quizá lo ignoren pero no siempre hubo internet. No siempre hubo un Google Maps que te guiaba, un Spotify que te permitía acceder a toda la música por una asequible tarifa plana o un algoritmo que te conducía por unas prácticas de consumo predeterminadas. Que el mundo entonces fuera mejor o peor ya es algo opinable. Pero que ha existido y existe una forma alternativa de estar en el mundo es una verdad que conviene no olvidar. Sí, se puede vivir sin estar plena y constantemente conectadxs.
De hecho, el músico canario Muyaio, uno de los artistas que más se mueve en el terreno tecnológico, tanto en su discurso musical como en las acciones paralelas* a éste, cuestiona de alguna manera en su nuevo disco, Pop Picón, este mundo hiperconectado. Detrás de muchas de sus canciones hay un posicionamiento, una opción de estilo de vida, planteando diversas formas de relacionarse con el mundo a través de internet.
Un Muyaio más ecléctico se abre paso en Pop Picón. En relación a 7 pecados tropicales, su álbum de debut de 2021, el tinerfeño amplía su abanico estilístico, su nómina de colaboradorxs y las temáticas tratadas. Sin el hilo conductor conceptual de su primer disco, Pop Picón arrastra entre líneas una serie de reflexiones que plantean una suerte de dialéctica entre la canariedad y la hiperconexión, entre una forma de vida relajada y otra dependiente de las redes.
Resulta evidente en ‘Chica Analógica’: un merengue urbano que se transforma en malagueña canaria (con colaboración vocal de Angélica Pérez, cantante folklórica de El Hierro y bisnieta la mítica Valentina la de Sabinosa, y de Fran Baraja) que dibuja una vida feliz ajena a las redes de internet. También en ‘Amigo de Tom’: una canción punkarra que acaba en rumbita nostálgica y que sirve a la vez de exaltación y de añoranza de la tecnología de los 90, de ese early internet en el que todxs tuvimos a ese primer amigo en MySpace llamado Tom. Incluso en la inaugural ‘El Algoritmo’ hay, no un rechazo, pero sí un cuestionamiento de los hábitos de consumo de lxs oyentes y de exposición de la propia industria musical. En un tono entre la cumbia y el dreampop, Muyaio aboga por un “algoritmo bueno” que, por cierto, se ha encargado él mismo de crear.
Pero ojo, Pop Picón no es en absoluto una manifiesto anti-internet o anti-tecnología. El autor canario simplemente expone una forma de vida que por momentos resulta alternativa a la que impone la corriente. ¿Que en ciertos puntos hay una visión crítica sobre la hiperconexión? Sí, pero en ningún momento demoniza. El discurso es siempre desenfadado y divertido. Es más, Muyaio se ha servido de la tecnología para construir el personaje de una de sus canciones: Julio IglesIAs, en ese temazo bedroom pop con ramalazos dub que es ‘Soñé con Julio’, compuesta, interpretada y producida en colaboración con Joan Colomo.
Otro personaje que aparece en el disco es Manu Chao, homenajeado en ‘Quiero Ser como Manu Chao’ por su postura ante la vida al vivir desconectado del mainstream, de la prensa, de los conciertos al uso… ¡un estilo de vida alternativo a la esclavitud tecnológica! Y en esa opción vital más relajada y libre encaja también ‘Déjala Ser Él’, una rumba con toques de flamenco (con colaboración de la cantaora Cristina López) que reivindica la libertad de elección de la identidad de género.
El disco lo completan ‘Se Dio Así’, con participación de Conxita Herrero y Fermí de la banda catalana Tronco, ‘Chiquito Pelete’, con Abel de Los Vinagres, y ‘Todos los Domingos’, que sorprendentemente contó con la colaboración de una banda mejicana de corridos mientras acababa de grabarla en un pueblo de montaña de Italia. La primera es un manual de ruptura amorosa bien, con sus guitarras cristalinas de slowcore y bedroom pop tan Muyaio. La segunda es una mezcla entre bossa nova y bedroom pop, entre João Gilberto y Mac DeMarco, que recrea ese frío perenne que sienten los canarios muy a menudo cuando visitan la península. Y la tercera es una canción de amor que arranca como cumbia villera para acabar siendo un corrido.
Sin alejarse de su inspiración latina pero enriqueciendo su paleta sonora, Muyaio amplía los parámetros estilísticos del pop picón canario. Un estilo caracterizado por el uso del humor, de expresiones locales y por el ensalzamiento de la canariedad, que encuentra en la figura de Arístides Moreno una suerte de padre fundador, y teniendo al propio Muyaio o incluso a Bejo entre sus voces más modernas. Y así, entre cumbias y rumbas, entre guitarras cristalinas de bedroom pop, avatares de IA y ética algorítmica, Muyaio reflexiona sobre la relación de la humanidad con la tecnología, con internet y, a la postre, consigo misma. Porque no eres solo tu rastro digital.
* Las acciones paralelas relacionadas con la tecnología son las siguientes:
Con el single ‘El Algoritmo’ Muyaio creó la web algoderitmo.com con un algoritmo de recomendación musical justo, que te recomienda una playlist de artistas independientes.
Con ‘Soñé con Julio’ hizo un chatbot de inteligencia artificial que emulaba a Julio Iglesias y podías hablar con él por wasap.
Y con el disco llega algo que podríamos definir como un fanzine conversacional, parlante: pop-picon.com. Se trata de una especie de revista digital e interactiva hecha a base de IA y chats con muchos personajes, los que aparecen en el disco; y que también te hace recomendaciones como las de algoderitmo.com. Hay nueve páginas o capítulos, nueve secciones donde, en cada una, podrás interactuar con los diversos personajes a la vez que escuchas cada una de las nueve canciones. Puedes interactuar con el algoritmo, hablar con Julio IglesIAs sobre sueños, de amor con Shakira, sobre Canarias, con Manu Chao sobre justicia social, con el mismísimo ChatGPT sobre identidad de género, con Kurt Cobain sobre los 90, sobre cine con Paolo Sorrentino y con la chica analógica sobre inteligencia artificial.
¿Habías visto alguna vez algo así? Realmente Pop Picón es muuucho más que un disco…
