Sasha Adrian lee el resumen antes de ver la película. Ese es uno de los nuevos patrones de comportamiento que adoptó para controlar los síntomas del trastorno de estrés postraumático tras una agresión sexual que sufrió hace siete años.
Su nuevo sencillo, “IMDb”, trata sobre la autoprotección: de una escena de una película y de la violencia en la vida real. A través de sus características melodías indie-pop, Sasha Adrian yuxtapone elegantemente los miedos que rodean una nueva relación con las reverberaciones del trauma sexual. En esencia, esta canción media sobre el miedo instintivo que tiene un sobreviviente de encontrarse en peligro una vez más.
La sorprendente línea inicial de Adrian en su coro expresa tanto el miedo omnipresente de ser lastimado por una nueva pareja como la mordaz realidad de vivir con trastorno de estrés postraumático. Sus letras equilibran la gravedad que surge de la falta de seguridad con matices cinematográficos. Como oyente, es difícil no sentirse desconcertado por la narrativa de la película, que pasa por encima de la energía potencial de la violencia. Incluso mientras Adrian canta “asesinos a sangre fría”, implica nuestro momento contemporáneo: la violencia contra las mujeres está lejos de ser anómala. Lo vemos todo el tiempo. En películas, medios y en nuestras propias vidas.
El humor fue el vehículo de Sasha Adrian para canalizar este material profundamente personal: “No es una canción que he escrito para que la gente sienta lástima por mí. Escribí IMDb porque sé que no soy el único que ha experimentado miedo y violencia. En cierto modo, no es tan diferente del miedo al desamor, pero al contrario del miedo al desamor, no es un miedo que debamos tolerar, aceptar o esperar”.
“Ya terminé de llevar mi carga sola. La seguridad es nuestra responsabilidad conjunta como sociedad y por eso quería compartir mi experiencia de lo que siento viviendo con miedo”.
Con “Token”, Sasha Adrian nos presentó su honestidad, temperamento y voluntad de hablar de verdades que a menudo preferiríamos enterrar. Su música contrasta poderosamente guitarras distorsionadas con voces penetrantes. Desde la vulnerabilidad susurrada hasta la ferocidad gruñida, el alcance de Adrian es a la vez aplastante y empoderador. Influenciada por personajes como Snail Mail, Phoebe Bridgers y Olivia Rodrigo, Sasha Adrian responde a la necesidad de su generación de dar voz a las verdades más tímidas.