A una década de su surgimiento, Yumi Zouma entra en 2024 consolidada como una de las propuestas más consistentes y evocadoras del pop alternativo contemporáneo. Su recorrido comenzó con un EP debut lleno de brumas shoegaze y paisajes dreampop, y con un sencillo inaugural, “A Long Walk Home For Parted Lovers”, que en 2014 se convirtió en un favorito indiscutible de la blogosfera, marcando el tono de una carrera atenta al detalle emocional y sonoro.
Con el paso del tiempo, la banda neozelandesa evolucionó hacia un synth pop más refinado y melódico, sin perder su esencia nostálgica. Su primer LP, Yoncalla, capturó esa transición con una elegancia contenida y emocionalmente resonante, posicionándolos como una voz singular dentro del pop alternativo global.

El crecimiento de Yumi Zouma se dio en paralelo a una constante presencia en giras internacionales, compartiendo escenario con artistas como Air France, Jamie xx o Lower Dens. A esto se sumó el apoyo de medios fundamentales como Pitchfork, FADER, SPIN y The Guardian, así como una fuerte rotación en estaciones como SiriusXM y Triple J, consolidando una audiencia fiel y dispersa en múltiples latitudes.
Ahora, tras varios álbumes y EP que han madurado su propuesta sin desdibujar su identidad, la banda abre una nueva etapa junto al sello Nettwerk Music con “Cross My Heart And Hope To Die”, un sencillo que marca un punto de inflexión tanto estilístico como temático. En esta nueva entrega, Yumi Zouma se muestra más urgente, más política, y también más existencial.
“Cross My Heart…” es, en muchos sentidos, el tipo de canción que sintetiza lo aprendido en diez años de carrera, pero también abre una ventana a lo que podría ser Yumi Zouma en su segunda década: una banda dispuesta a ensuciar la superficie, a asumir riesgos estéticos y temáticos, sin renunciar a su sensibilidad melódica.
































