Cande y Paulo comentan: “Este moderno clásico latinoamericano fue repentinamente catapultado alrededor del mundo y la naturaleza de su viaje tocó la fibra sensible de nuestra propia historia personal, razón por la cual sentimos que pertenecía a nuestro álbum debut.
Fue escrito hace solo unos años y, sin embargo, desde la primera vez que lo escuchas, suena como uno que conoces de toda tu vida. El genio de Rodrigo Amarante radica en hacer que algo tan contemporáneo suene tan tradicional y nuestro enfoque fue ser lo más respetuoso posible con su simplicidad. Se necesitó muy poco para que esta canción funcionara”.