
Micah P. Hinson regresa con The Tomorrow Man, un disco que marca un giro radical en su trayectoria. Atrás queda el folk rock trágico que lo definió durante años; ahora, el crooning melancólico toma el protagonismo, con la voz como centro emocional y narrativo. Es un álbum que no busca consolar, sino despertar, que no ofrece respuestas fáciles, pero sí verdades vividas.
Precedido por el sencillo “Oh, Sleepyhead”, publicado el 13 de junio, el álbum se presenta como el relato íntimo de un hombre enfrentado a sus propios límites, decisiones y recuerdos. “Las cosas que en su momento parecían amor se habían convertido en control”, confiesa Hinson. Esa frase resume el espíritu del disco: el final de una etapa, el inicio de otra, y el precio de la libertad.
Con arreglos orquestales del ensemble de Benevento liderado por Raffaele Tiseo y producción de Alessandro “Asso” Stefana, The Tomorrow Man construye un paisaje sonoro visceral, lleno de capas pero nunca edulcorado. Cada canción es una exploración de la lucha cotidiana entre esperanza y desilusión, como en “Take It Slow”, “Think of Me” o “I Don’t Know God”, donde Hinson aborda la pérdida de la fe con templanza y sin resentimiento.
Track List:
1. Oh Sleepyhead
2. One Day I Will Get my Revenge
3. Think Of Me
4. Mothers & Daughters
5. Take It Slow
6. The Last Train To Texas
7. Hallow
8. I Don’t Know God
9. I Thought I Was The One
10. I Was Just Standing There
11. Walls
12. Oh Sleepyhead (Reprise)
El disco es también una crónica de la América interior: Memphis, Texas, la fe, la desilusión, las adicciones, la prisión, y la música como salvación. Hinson transforma todo esto en un acto lírico de resistencia. Desde “Think of Me”, escrita en minutos y considerada por él como “la canción más importante de mi vida”, hasta “The Last Train to Texas”, que narra obsesión y reinvención, pasando por “Walls”, una metáfora de las barreras emocionales que levantamos para sobrevivir.
Micah P. Hinson - Oh, Sleepyhead! (Official Video)
Hay una dualidad fascinante en The Tomorrow Man: profundamente americano en su desolación pastoral, pero también europeo en su construcción artesanal y su capacidad de emocionar sin manipular. No es casual que Italia se haya convertido en su segundo hogar creativo, donde ha encontrado una escena que lo acoge con respeto y atención.
Este nuevo trabajo no habla del pasado, sino de lo que queda cuando todo parece perdido. Hinson ya no canta para las almas solitarias: canta con ellas. En un mundo saturado de filtros y narrativas prefabricadas, su música se mantiene como una anomalía preciosa, una que no se vende, sino que sirve. Sirve para recordar que decir la verdad, hoy, es un acto de amor.
Micah P. Hinson - One Day I will Get My Revenge (Visualizer)
The Tomorrow Man es también el resultado de una crisis creativa profunda que lo atravesó en 2020. Fue junto a Asso Stefana que encontró el punto de inflexión, escribiendo entre Texas y España un disco completamente arraigado en el presente. “He estado buscando estas canciones toda mi vida”, asegura. Y esa búsqueda se siente en cada nota.
Micah P. Hinson, nacido en Memphis y criado en Texas en una familia religiosa con raíces Chickasaw, ha recorrido un camino lleno de sombras y redenciones. Desde su debut en 2004 con Micah P. Hinson and the Gospel of Progress, ha construido una discografía que habla de dolor, fe, memoria y resistencia. Con The Tomorrow Man, ese viaje alcanza una nueva profundidad. Una que no se mira atrás, sino hacia adentro.



































