Avery Lynch regresa hoy con su nuevo sencillo, “Lasting Effects”, una reflexión íntima y a la vez empoderadora sobre el amor, la pérdida y el autodescubrimiento. Aprovechando el impulso de sus recientes sencillos, “Lasting Effects” ofrece otra vívida mirada al mundo emocional de su próximo proyecto, que se lanzará a finales de este año.
La inspiración para “Lasting Effects” surgió tras una ruptura amorosa, cuando le dijeron a Avery que nadie más la amaría como él. “En ese momento, supe que estaba equivocado”, comparte. “Pero a medida que me alejaba de la situación, me di cuenta de que tenía razón, pero no de la forma en que él pensaba.
Me di cuenta de que nunca quiero a alguien como él y que no quiero ser amada así”. En lugar de desmoronarse, la experiencia se convirtió en un punto de inflexión, ayudando a Avery a redescubrir partes de sí misma que habían quedado silenciadas durante la relación. “Creo que es una canción muy positiva y esperanzadora”, añade. “Espero que inspire a la gente y deje un impacto positivo duradero”.
Conocida por su lirismo emotivamente crudo y su producción discreta, Avery invita una vez más a los oyentes a sumergirse en su mundo interior con una canción profundamente personal y fácilmente identificable. Construida con teclas suaves, texturas ambientales y percusión silenciosa, “Lasting Effects” es un tema de una hermosa sobriedad que deja que su carga emocional respire a través de melodías delicadas y letras emotivas. Coproducida por Jordanlilvee, Michael Blum y la propia Avery, la canción marca un paso emocionante en su evolución como productora y narradora.
Originaria de Pensilvania, la trayectoria musical de Avery comenzó a los 7 años, componiendo piezas para piano antes de evolucionar hacia la composición. Actualmente, radicada en Los Ángeles, su sonido característico —arreglos de piano exuberantes y melancólicos combinados con una voz suave y expresiva— se ha convertido en la base de su arte. Cada canción comienza con Avery sola al piano, creando demos íntimos y emocionalmente ricos que luego perfecciona con sus colaboradores de confianza. Su voz, tierna pero profundamente evocadora, infunde vida a sus letras, convirtiendo cada canción en una confesión personal.
A menudo descrita como una “chica feliz llena de canciones tristes”, su música es una obra maestra de narrativa, inspirada en sus experiencias vitales, el mundo que la rodea y los medios que consume. Con elogios de figuras clave como Ones To Watch y EARMILK, y una base de fans en rápido crecimiento que la ha ayudado a superar los 400 millones de reproducciones, Avery continúa demostrando su talento para convertir la emoción pura en canciones íntimas, cercanas y discretamente cautivadoras.
